Se ha pasado la fiebre, se han evaporado las alucinaciones creadas en mi cerebro fruto del aumento de temperatura. Ya estoy recuperada y con ganas. Bien.
He dejado la cabaña del interior en la que he pasado el invierno y me acabo de instalar en playa sur, la zona más bonita de la isla que parece sacada de un sueño tan real como la arena que se me pega en los pies.
Aquí he instalado mi hamaca, con la tela de las velas que no pienso utilizar en una posible huída de este lugar. No quiero irme de aquí, así que me he centrado en hacer de mi isla un sitio más cómodo, más habitable. He hecho de ella mi hogar.
El calor empieza a apoderarse de la tierra firme, las palmeras se baten con un viento que cada vez es más cálido y que día a día me seca la piel. He aprendido a sacer aceite del coco que soy incapaz de comer. Tengo la piel hidratada y el pelo cada vez más rubio por efecto del sol.
Me espera el fin de la primavera y la pronta llegada del verano….verano….noches cortas…días largos….calor…el aumento de la pesca…ummm podré comer más pescado y menos algas….
Esto promete.
Anne
Martes de cuento:
Asi es, mi cabaña de verano es de lo mejor….aunque no puedo decir lo mismo de la de invierno.
En verano hace mucho calor pero es una estación en la que la vida es más fácil.
Por cierto, cuando quieras un lugar tranquilo para escribir, ya sabes…
Saludos,
Anne
Me gustaMe gusta
¡Vaya cabaña! 🙂 Yo quiero una igual.
Me gustaMe gusta
Jony:
Me temo que no puedo salir de mi isla. ¿Qué tal si me envías un trozo de Chile hasta aquí?
Si puedo elegir me quedo con el desierto de Atacama. Tengo tiempo para convertirlo en selva.
Un saludo.
Anne
Me gustaMe gusta
La cabaña rural en Paul:
Gracias por tu Ping 🙂
Anne
Me gustaMe gusta
Flavia:
¿Te gusta mi cabaña de verano verdad?
Es que esto de las islas, las de los últimos destinos, las de las ultimas verdadedes 😉 dan mucho de sí. Un pequeño trozo de tierra y todo mar y mar y mar.
No leo mucho porque aquí no llegan los libros, sigo visitando la playa tras las tormentas, espero un gran tesoro con baúles llenos de cosas.
Espero un nuevo libro de Houellebecq o una nueva trilogía de Agota Kristoff …
Un saludo hasta tu isla (de la última verdad).
Anne
Me gustaMe gusta
Sinuhé:
Claro que me acuerdo de Mary. Iré a visitar tu post, seguro que es, como siempre, muy interesante.
Un saludo.
Anne
Me gustaMe gusta
Esto demuestra aquello que dicen que tras la tormenta siempre llega la calma. Por cierto, hoy he escrito algo sobre Mary Read ¿Te acuerdas de ella?
Me gustaMe gusta
Buenas noticias, tu recuperación y entusiasmo. Y esa cabaña… fantástica para tantas cosas, ¿verdad?
¿Lees mucho, ahí? ¿Qué lees?
Me gustaMe gusta
Pingback: La cabaña rural en Paul
Que bueno Anne! que te encuentres mejor, ojala algún día en tus viajes, vengas a Chile!
Me gustaMe gusta